En no pocas ocasiones, usamos los términos como si fueran sinónimos. No entendemos por qué estas dos patologías son diferentes entre sí. Por eso, hoy nos gustaría tomarnos un minuto (o varios) para explicar de una forma detallada cuál es la diferencia entre ansiedad y depresión. Presta atención porque se trata de un problema actual y que cada vez tiene más incidencia en nuestra sociedad.
Actualmente, los problemas de salud mental están saliendo del silencio en el que estuvieron durante muchísimos años. Se está perdiendo el miedo a hablar, a contar lo que se siente, expresar sentimientos y momentos oscuros y pedir ayuda profesional. Son los primeros (y correctos) pasos para tratar de resolver un problema que no nos afecta físicamente, pero sí a nivel mental, reduciendo nuestra calidad de vida drásticamente y sometiéndonos a un tormento diario pocas veces perceptible desde fuera.
Descubre la diferencia entre ansiedad y depresión
La mayor diferencia entre ansiedad y depresión es que la ansiedad se caracteriza por episodios de miedo y angustia constante, mientras que la depresión fuerza al paciente a una vida en la que no disfruta de motivación ni interés para realizar tareas que antes le resultaban satisfactorias.
Como vemos, estamos ante dos problemas totalmente diferentes entre sí y que no afectan a la persona de igual forma. La depresión es un estado de ánimo caracterizado por un decaimiento en el que se pierden las ganas de hacer cosas que antes nos gustaban, nos llenaban y nos resultaba placenteras. Dicho de otra manera, se pierde la motivación para seguir viviendo de la misma forma que se había hecho hasta ese momento.
Entre los principales síntomas que nos permiten identificar una depresión, podemos destacar:
- Tristeza continuada
- Pérdida de interés por actividades placenteras
- Sentimiento de culpa o inutilidad excesiva
- Pérdida o aumento de peso importante
- Falta de autoestima
- Visión negativa de uno mismo
- Alteraciones del sueño o sensación de fatiga
- Dificultad para concentrarse
- Aislamiento social
¿Y qué hay de la ansiedad? Cuando nos referimos a ella, estamos haciéndolo a una emoción secundaria que deriva del miedo ante situaciones ambiguas y que surge como una anticipación de resultados negativos, provocando que nuestro organismo y nuestro cuerpo reaccione para enfrentarse a un peligro detectado.
Sin principales síntomas son:
- Respiración superficial y sensación de ahogo
- Pulso acelerado
- Molestias gastrointestinales
- Dolor de cabeza
- Anticipación de resultados no deseados
- Preocupación, angustia, miedo e inseguridad
- Abandono de actividades
- Hiperactividad
Como se puede ver, la mayor diferencia entre ansiedad y depresión radica en que la primera viene marcada por el miedo constante, mientras que la segunda es una falta de motivación constante la que ejerce como sensación predominante.